Jesús dijo: “Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero” Juan 17:3
Decimos que algo es verdadero cuando es fiel a sí mismo, y por eso digno de confianza porque da seguridad.
Los medios de comunicación nos informan acerca de los sucesos que ocurren a nivel local e internacional. De tal manera, podemos estar informados de los acontecimientos que están marcando la historia de nuestro país y del mundo.
La mayor parte de las noticias no son agradables, mas bien todo lo contrario. Muchas dejan un sentimiento de dolor, impotencia o desilusión cuando las oímos. Todos los medios quieren tener noticias fidedignas , pero lamentablemente alguno de ellos tergiversan la información, exagerando o contando solo una parte de la verdad.
La palabra de Dios también nos da a conocer los acontecimientos pasados, los que están sucediendo y los que habrán de venir. Pero a diferencia de algunos noticieros, no cambia la información, ni esconde detalles. Nos muestra personas que si bien han servido a Dios, también han cometido numerosos errores, y algunos que por esta causa hasta han perdido la vida. La Biblia no encubre los pecados cometidos, por ejemplo en el caso del rey David, sus errores fueron expuestos y sacados a la luz.
Dios desde el principio mostró la verdad porque Él es la verdad. El es el dueño y creador de la “Biblia”, por medio de ella conocemos al autor, quien jamás nos engaña. La verdad es una palabra tan anhelada y buscada por todos, y Jesús es la Verdad, porque El es el único verdadero y fiel.
Decir que Dios es verdadero no es una afirmación estática sino dinámica ya que se manifiesta en el cumplimiento de sus promesas, decretos y advertencias.
Es triste sentirse engañado cuando creíamos algo que al final resulta ser una mentira, pero de ninguna manera esto puede ser experimentado por una persona que ha creído en la palabra de Dios, porque en ella solo encontramos verdad.
Recuerda que Dios no solo nos da a conocer buenas noticias, sino que además las declara para que se cumplan en nuestras vidas.
El no miente, no engaña y todo lo que promete lo cumple. Cree y espera en El porque si El lo dijo, lo hará.
Decimos que algo es verdadero cuando es fiel a sí mismo, y por eso digno de confianza porque da seguridad.
Los medios de comunicación nos informan acerca de los sucesos que ocurren a nivel local e internacional. De tal manera, podemos estar informados de los acontecimientos que están marcando la historia de nuestro país y del mundo.
La mayor parte de las noticias no son agradables, mas bien todo lo contrario. Muchas dejan un sentimiento de dolor, impotencia o desilusión cuando las oímos. Todos los medios quieren tener noticias fidedignas , pero lamentablemente alguno de ellos tergiversan la información, exagerando o contando solo una parte de la verdad.
La palabra de Dios también nos da a conocer los acontecimientos pasados, los que están sucediendo y los que habrán de venir. Pero a diferencia de algunos noticieros, no cambia la información, ni esconde detalles. Nos muestra personas que si bien han servido a Dios, también han cometido numerosos errores, y algunos que por esta causa hasta han perdido la vida. La Biblia no encubre los pecados cometidos, por ejemplo en el caso del rey David, sus errores fueron expuestos y sacados a la luz.
Dios desde el principio mostró la verdad porque Él es la verdad. El es el dueño y creador de la “Biblia”, por medio de ella conocemos al autor, quien jamás nos engaña. La verdad es una palabra tan anhelada y buscada por todos, y Jesús es la Verdad, porque El es el único verdadero y fiel.
Decir que Dios es verdadero no es una afirmación estática sino dinámica ya que se manifiesta en el cumplimiento de sus promesas, decretos y advertencias.
Es triste sentirse engañado cuando creíamos algo que al final resulta ser una mentira, pero de ninguna manera esto puede ser experimentado por una persona que ha creído en la palabra de Dios, porque en ella solo encontramos verdad.
Recuerda que Dios no solo nos da a conocer buenas noticias, sino que además las declara para que se cumplan en nuestras vidas.
El no miente, no engaña y todo lo que promete lo cumple. Cree y espera en El porque si El lo dijo, lo hará.
“Dios no es hombre, para que mienta, Ni hijo de hombre para que se arrepienta. El dijo, ¿y no hará? Habló, ¿y no lo ejecutará?” Números 23:19
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